Frases de cabecera

-"Si no estáis prevenidos ante los Medios de Comunicación, os harán amar al opresor y odiar al oprimido." Malcolm X.

septiembre 18, 2015

El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ataca a la prensa



Los trabajadores agrupados en La Gremial de Prensa repudiamos el ataque del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires encabezado por Mauricio Macri contra el canal de noticias C5N en represalia por las investigaciones periodísticas en las que se revelaron hechos de corrupción que involucran a funcionarios y candidatos del PRO. No es casual que se opere contra un medio y sus periodistas con la misma herramienta –la justicia contravencional- con la que se clausuraron decenas de centros culturales comunitarios que no entran en su política antipopular y privatizadora.

El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires clausuró el galpón donde están los móviles de exteriores del canal C5N. La empresa denunció que el gobierno porteño hace dos meses que no paga la pauta publicitaria como represalia por sus publicaciones, que rompieron el cerco mediático que protege al jefe de gobierno porteño y candidato presidencial Mauricio Macri.


Hemos repudiado meses atrás el despido de dos delegados de base de la página Web Minuto1 y continuamos exigiendo su reincorporación, pero rechazamos los ataques del PRO a esa señal, que no están dirigidos a afectar los intereses de esa patronal sino a atacar al trabajo de periodistas que pusieron luz sobre los negocios espurios del gobierno porteño, a la vez que ponen en riesgo la continuidad de puestos de los trabajadores de esa emisora.


Este ataque se inscribe en el marco de la campaña sucia que lleva adelante la oposición y que se expresa también en la judicialización de las elecciones en Tucumán y en otras operaciones de público conocimiento que buscan minar la imagen del Gobierno y de los candidatos del campo nacional y popular.


Cuando El PRO predica ser lo nuevo, lo tolerante, lo transparente, lo democrático, por otro lado no repara en gastos para sancionar a quienes piensan distinto o desnudan su política para pocos. Este acto de censura, disfrazada de clausura contravencional, busca disciplinar la libertad de expresión.