Frases de cabecera

-"Si no estáis prevenidos ante los Medios de Comunicación, os harán amar al opresor y odiar al oprimido." Malcolm X.

septiembre 23, 2010

El edificio y la plata que están, pero no quieren ver

 
Las autoridades de la Facultad de Ciencias Sociales comunicaron oficialmente cuál es la situación, a pesar de las "decisiones" que toma el centro de Estudiantes. Son los mismos dirigentes que se reunieron con los responsables de la construcción del nuevo edificio, vieron lo que no quieren -o no les conviene ver- y se callaron la boca. Tal vez teman que muchos miles de estudiantes se enteren de cómo les ocultan la información para poder mantener la toma de la Facultad de Ciencias Sociales, llegar a la pérdida del cuatrimestre. Sería bueno que la mayoría de los estudiantes supiera por qué tendrán que inscribirse nuevamente en 2011 en las materias que iban a cursar este año:


Fatala se reunió con estudiantes universitarios

El subsecretario de Obras Públicas y pre candidato a Jefe de Gobierno porteño, se reunió con estudiantes universitarios para analizar el avance de las obras en el edificio único de la Facultad de Sociales de la UBA.

Jueves, 23 de Setiembre de 2010 - 20:20 hs

Abel Fatala se reunió con representantes del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales y también de agrupaciones independientes para comentarles el avance y la continuidad de las obras en el edificio único que se encuentra en el Barrio de Constitución.
“En diciembre de este año concluirán las obras de la segunda etapa, lo que permitirá que se trasladen las Carreras de Ciencias de la Comunicación y Ciencia Política, al nuevo edificio, donde ya se cursa la carrera de Trabajo Social. La tercera etapa ya cuenta con la previsión presupuestaria correspondiente para comenzar ni bien termine la segunda”, les comentó Fatala a los alumnos. 
“Esta obra es la más importante en envergadura para la Universidad de Buenos Aires, desde la construcción de Ciudad Universitaria. Esto se evidencia en la superficie total del edificio, que es de 48.500 metros cuadrados. La tercera y última etapa, cuenta con una superficie de 35.000 metros cuadrados que harán posible que el edificio único sea un espacio cómodo y digno para estudiar”, agregó Fatala.
“Aprovecho para remarcar la voluntad del Gobierno Nacional de invertir en todos los niveles de la educación pública y la voluntad permanente de dialogo con los actores de la comunidad universitaria en su conjunto e invito a quienes así lo desean a recorrer la obra actualmente en construcción para conocer la misma”, concluyó Fatala.

La comunicación oficial de la Facultad (que todos deberían leer, antes de escribir cualquier cosa)

A los estudiantes de la toma, a los que se oponen a ella, a los docentes y a la comunidad toda de Sociales

Tal y como la mayor parte de la comunidad de Ciencias Sociales debe ya saber, la asamblea estudiantil realizada el miércoles 22 de septiembre aprobó continuar con la toma bajo una nueva modalidad: abrir las aulas e impedir el ingreso de las autoridades legal y legítimamente electas hace un año y, dicho sea de paso, también docentes de la casa.
Ante este nuevo giro en los acontecimientos, las autoridades de la Facultad desean puntualizar algunas apreciaciones pertinentes, para información y consideración de todos los miembros de la comunidad:

1.- Lamentamos la resolución adoptada que interpone nuevos obstáculos en la búsqueda de una salida al ya de por sí difícil conflicto.
2.- Pese a ella, reiteramos firmemente nuestra más completa disposición al diálogo,  que siempre estuvo presente en condiciones razonables. Instamos en varias oportunidades a los estudiantes que llevan adelante estas medidas, inclusive personalmente, a que resignaran o suspendieran las mismas, a los fines de entablar un escenario de diálogo sin acciones coercitivas. Apenas la toma sea completamente levantada, nos comprometemos a convocar a una mesa de diálogo con los estudiantes, destinada realmente a buscar y alcanzar acuerdos duraderos.
3.- Nos vemos obligados a reiterar que, lamentablemente, mientras la toma se prolongue no hay ni siquiera condiciones físicas (y menos, razonables) para que el diálogo se desarrolle. La imputación a las autoridades de falta de voluntad de diálogo carece de sentido cuando de manera simultánea se desconoce y se cancela el valor de las instituciones de gobierno con las que se proclama querer conversar y a las que se le plantean, a la vez, demandas concretas que esperarían respuesta.
4.- No somos, sin embargo, pesimistas. Entendemos –y permítasenos la interpretación— que la resolución adoptada está al menos parcialmente dirigida a ofrecer una válvula a la presión que de hecho ejercen los muchos estudiantes que resienten la duración de la toma y se manifiestan a  favor de una recuperación de la normalidad en las asignaturas que cursan. Complementariamente, quizá se trate también de introducir una cuña en esa considerable mayoría de docentes que por propia decisión no se ha plegado al dispositivo de las llamadas “clases públicas”.
5.- En este marco, las autoridades de la Facultad subrayan que la apertura de las aulas bajo control estudiantil, con impedimento al ingreso de las autoridades y del normal desarrollo administrativo, no significa en absoluto un levantamiento de la toma. El cambio de modalidad no altera la situación.  Desde todo punto de vista institucional la Facultad, desafortunadamente, sigue tomada.
6.- Los estudiantes y los docentes deben saber que los esfuerzos que a partir de ahora puedan poner en juego con su mejor buena voluntad para recuperar una supuesta normalidad no alcanzan para acreditar formalmente las regularidades de cursada, ni para efectivizar las designaciones pendientes (incluidas las de quienes se espera que den clases) ni para asegurar la validez del cuatrimestre y preservarlo de riesgos.
7.- A los ojos de muchos estudiantes y docentes, la estructura administrativa de la institución y en particular sus autoridades, invisibilizan con frecuencia la importancia de su condición de soporte y garantía de la eficacia de las actividades académicas regulares (y entonces aparecen como una mera burocracia) cuando en realidad cumplen una infinidad de tareas que la actividad académica requiere que sean cumplidas, so pena de que tampoco estas actividades académicas alcancen su cometido institucional (actas, acreditaciones, validación de los estudios, regularidades, designación de docentes, carga de datos, inscripciones a exámenes, entrega de títulos, certificación de actividades cumplidas, etc.)
8.- Nos interesa también señalar que mientras la toma no se levante completamente, son los estudiantes que participan de ella los responsables absolutos de la situación en la que se encuentren las sedes, sus mobiliarios y demás elementos de trabajo que conforman el patrimonio público, y del que las autoridades son normalmente custodios.
9.- Una vez más proponemos la constitución de una instancia que permita el tratamiento de los reclamos planteados, previa suspensión de las medidas de fuerza. Entendemos que dicha instancia debería estar compuesta por un número de miembros que permita el intercambio real de opiniones e información. Asimismo, se deberían transparentar sus sesiones con registros y desgrabaciones destinadas a hacerse públicas y llevarse a cabo con la presencia de testigos. A tal fin proponemos, por parte de las autoridades, la presencia de tres consejeros directivos, tres funcionarios y el Decano. Del mismo modo, nos permitimos sugerir a los estudiantes la presencia de tres consejeros directivos del claustro estudiantil y otros cuatro representantes estudiantiles del CECSo o quienes así dispongan. Como observadores o testigos sugerimos la presencia de los/las  directores/as de las cincos Carreras y los dos Institutos. El compromiso inicial debería partir del tratamiento de una agenda propuesta y aceptada por las dos partes y ciertas condiciones de diálogo a ser consensuadas en el primer encuentro.
10.- Deseosos de que la toma se levante más temprano que tarde, de modo de limitar las consecuencias perjudiciales que ella arrastra para todos, declaramos nuestra decisión de mantenernos expectantes y esperanzados, con toda la paciencia que resulte necesaria, hasta que las condiciones para un diálogo genuino puede efectivamente cobrar cuerpo y comenzar a restañar los otros daños, los más importantes, los que hacen a la reposición de la condiciones de convivencia y gobierno entre todos los sectores capaces de participar en la recuperación de un proyecto de Facultad que encarne decididamente el compromiso social, la calidad de sus actividades académicas y el cumplimiento del rol que la sociedad espera de nosotros y a cuyo esfuerzo nos debemos.
Decano y autoridades de la Facultad de Ciencias Sociales

Más ayuditas para Macri


(Por Rubén Levenberg) El centro de estudiantes y su asamblea decidieron continuar con la ocupación de las sedes de la facultad de Ciencias Sociales de la UBA y aprovechar la privatización del espacio público para usar las aulas como lugar de debate "bajo el control de los estudiantes", una apelación extraña, ya que hasta ahora el centro de estudiantes hizo uso privado de las sedes ocupadas, destruyó parte del edificio en construcción cuya construcción dice exigir y sólo logró convencer a un grupo importante de alumnos de que la huida hacia adelante es la mejor manera de resolver los conflictos. Si es que el conflicto existe.

Mientras tanto, hay dos beneficiarios. Uno es el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, quien acostumbrado a patear hacia el gobierno nacional o hacia quien pueda, cualquiera de los conflictos que provoca, ahora puede decir que no es que él trabaje para destruir la educación pública sino que la educación pública en general está en crisis.

Los otros beneficiarios son los medios de comunicación masiva concentrados, que ya fueron apoyados por las mismas agrupaciones que hoy toman la Facultad cuando se debatía la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisuales.

El diálogo perdido
A pesar de que fueron echados de la Facultad que deben gobernar por el voto de los claustros, las autoridades de Sociales han llamado al diálogo en varias oportunidades y la misma actitud asumieron más de 400 docentes y la mayoría de las agrupaciones de graduados, fundamentalmente para volver a la normalidad a la institución y en todo caso sumar fuerzas para acelerar la construcción del edificio. La respuesta, igual que cuando las autoridades llamaron a dialogar para ver cómo se terminaba con el subalquiler privatista para "fiestas" en las que algunas agrupaciones hacen dinero y destruyen la sede de M.T. de Alvear, fue despectiva y autoritaria.

Uno debería suponer que la oferta de diálogo sigue abierta, porque las autoridades siguen creyendo que la facultad de Ciencias Sociales no es un coto privado sino una institución para formar científicos sociales críticos, cuyo aporte es valioso para el conjunto de la sociedad. Desde este blog advertimos que quedan pocas oportunidades para que no se pierda el cuatrimestre de cursada, que los postgrados se pierden y decenas de estudiantes, entre ellos muchos extranjeros que confiaron en el prestigio de la UBA, concluirán que es mejor ir a cursar postgrados a alguna universidad privada. Las respuestas hasta ahora han sido, como puede comprobarse en algunos de los comentarios que se publicaron en este blog, que las actividades de la Facultad son burocráticas e innecesarias, que a nadie le importa si se estudia o no, que lo importante es la lucha. Adivinen quién gana.

septiembre 22, 2010

Los periodistas necesitamos un gremio, no una ONG

 Hoy miércoles 22 de setiembre a las 16, frente al diario Crítica, en Maipú 271, Osvaldo Bayer hablará a los trabajadores de prensa en el marco del cierre de campaña del Frente de Unidad para las elecciones que se realizarán en la UTPBA durante los días martes 28 y miércoles 29 próximos. A pesar de que cuentan con una Junta Electoral denunciada, sin haber entregado los padrones a la oposición y con todas las maniobras posibles para mantener a lo que debería ser un gremio de prensa, como una ONG que deja a los colaboradores como "invisibles" y marginados, que no defiende a los trabajadores en conflicto, que se ocupa únicamente de hablar de libertad de prensa en el exterior del país, el Frente de Unidad no abandona la lucha.
Aquí reproducimos el comunicado de la Agrupación La Gremial:


Los integrantes de la lista del Frente de Unidad realizarán hoy desde las 12 una caravana que recorrerá las empresas del gremio de prensa para celebrar con alegría la unidad alcanzada entre las agrupaciones El Colectivo, La Naranja, La Violeta y LA GREMIAL, con el objetivo de recuperar la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA) para la defensa de los derechos de los trabajadores.

A las 16, la caravana hará una parada en la redacción del diario Crítica (Maipú 271), para acompañar a los compañeros que siguen luchando por la defensa de sus fuentes de trabajo. Allí, Osvaldo Bayer, candidato a Secretario General del Frente, hablará a todos los trabajadores.

La caravana de candidatos/as, trabajadores/as y delegados/as partirá a las 12 desde Macacha Güemes y Costanera Sur y visitará la sede de la obra social OSTBA, Radio Nacional (a las 13), La Nación (13.30), Editorial Perfil, NA y DyN (a las 14), Télam (a las 14.30), Clarín (a las 15), Página/12 (a las 15.30), Crítica (a las 16), Crónica (a las 16.45), Publirevistas (a las 17), Tiempo Argentino (a las 17.30) y finalizará en Canal 7.

El 28 y 29 de septiembre hay elecciones en la UTPBA.

Para tener un sindicato de puertas abiertas, los trabajadores de prensa votamos a Osvaldo Bayer como Secretario General.

Para tener un sindicato que defienda nuestros derechos, los trabajadores de prensa votamos al Frente de Unidad.

septiembre 21, 2010

Qué pasa en la facultad de Ciencias Sociales


(Por Rubén Levenberg) Ayer fue un lunes soleado y a las 17 el salón, con el decano Sergio Caletti en el frente estaba colmado de docentes de Ciencias Sociales, con varios grupos que se apretujaron en la entrada para escuchar y participar del debate sobre la situación creada en la facultad por la toma de los edificios por parte del Centro de Estudiantes. Hubo opiniones diversas que enriquecieron la visión general sobre la situación. La presente síntesis es es un relato de quien firma esta nota y por lo tanto es subjetivo. Pero vale la pena, porque la comunidad de alumnos de Ciencias Sociales debe conocer algunos hechos:

-Hubo unanimidad en criticar la pretensión de vincular los reclamos legítimos de los estudiantes de enseñanza media de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuyas reivindicaciones desnudan la política del gobierno porteño de desfinanciar la educación pública, con el caso de la facultad de Ciencias Sociales. La situación de la facultad de Ciencias Sociales es diferente: Hay un edificio en construcción, con condiciones óptimas, con un comedor estudiantil programado –y que los dirigentes del Centro de Estudiantes conocen y aprobaron- con pasillos amplios para garantizar la seguridad y con obreros y máquinas trabajando día a día para avanzar. (VER FOTO, POR SI QUEDAN DUDAS)

-De todos modos, también una mayoría compartió la reivindicación de acelerar la construcción y de redoblar esfuerzos para la mejora de los edificios de MT de Alvear y Parque Centenario, con el fin de adecuar las condiciones de cursada durante su funcionamiento provisorio.

-También hubo quienes resaltaron que la toma del edificio nuevo por parte del Centro, la apropiación –o privatización- del aula 6 para uso del Centro y la puesta en riesgo de toda la construcción es al menos, contradictoria con lo que se declama. Reclamar la construcción de un edificio público y luego tomarlo, violar los planos originales, apropiarse de un aula y poner en riesgo toda la construcción es inexplicable e inaceptable.

-Igualmente hubo quienes recordaron el subalquiler del edificio de MT de Alvear por parte de algunas agrupaciones, lo cual implica también una privatización de un edificio público para beneficio económico de algunas personas. Dicha actitud es contradictoria con la propuesta de reclamar mejores condiciones de cursada, cuando durante dichas fiestas se destruye parte del mobiliario y de las instalaciones de la Facultad, cuyas autoridades tienen que pagar multas municipales por escándalos públicos, reponer sillas y mesas que quedan destruidas, además de la limpieza y reparaciones que tienen un costo alto para el presupuesto universitario. 

-También hubo docentes que resaltaron que las reivindicaciones que el Centro sostiene, como la desacreditación a la CONEAU o la entrega de dinero al Centro para que lo distribuya en “becas” sin control de cuál es el uso del dinero, entre otras, son cuestiones que no tienen mayor sustento. La desacreditación a la CONEAU pondría en riesgo todo el sistema de investigación de la facultad y terminaría con la carrera de decenas de investigadores y becarios del CONICET, cuya actividad no sólo es una reivindicación histórica de la Facultad sino también una señal del avance de las Ciencias Sociales en el sistema científico nacional. También recordaron que con la toma se impidió el debate del Consejo Directivo acerca del reclamo de subsidios por parte del Centro de Estudiantes.

-Pero el mayor problema planteado fue cómo resolver la terminación del cuatrimestre. Es un hecho que la mayoría de los docentes de la Facultad no dicta clases porque no hay condiciones mínimas para hacerlo y porque los trabajadores docentes sólo reconocen como autoridades de la Facultad al decano, la vicedecana y al Consejo Directivo que surgieron de las últimas y legítimas elecciones. Es el mismo Consejo Directivo donde los estudiantes tienen una representación elegida por el voto obligatorio.

-Si bien algunas cátedras están reprogramando sus cronogramas de trabajo, se presentan dos problemas de difícil solución: El primero es que no se puede quitar contenidos, porque la Facultad tiene la función de formar cientistas sociales y las materias y seminarios fueron pensados con dicho fin. No hay contenidos “sobrantes” que se puedan descartar. El segundo es que la prolongación indefinida de la toma, amenaza con hacer caducar también las reprogramaciones.

Para finalizar este relato de quien participó de la reunión como profesor de la Facultad, hubo un rechazo terminante a cualquier visión que pretenda despolitizar la Universidad, porque la militancia es un camino de la formación cívica de los jóvenes estudiantes. También se propuso poner en debate muchas de las cuestiones que atañen a la comunidad universitaria en el marco de las Ciencias Sociales.

Igualmente fue unánime la decidida voluntad de dialogar, pero se planteó que no se puede establecer un diálogo entre las autoridades elegidas por la comunidad universitaria y el Centro de Estudiantes con los edificios tomados, las autoridades echadas de la Facultad y los órganos de Gobierno legales y legítimos sin poder funcionar. Hay que dialogar, pero en condiciones razonables y sin ningún tipo de coerción. Es un tema para reflexionar, no sólo desde quienes toman la facultad, sino desde el lugar de todos los afectados por la medida, de toda la comunidad universitaria.